Historias de Pocha (6)

Hoy no me siento en mis cabales. Nada tiene que ver con el nudo que tengo en la garganta, ni con mi estado anímico, menos con el saludo del kiosquero o con que el cuarto de libra este costando $38, tampoco con que se hayan acabado las oreos en la oficina, ni con todo lo que tengo que hacer para la facu esta semana, e incluso no concibo el hecho de no estar insultando al burrito pronosticador que m

e trajo mi abuela de las sierras por el frió que hace hoy después de los hermosos 32º que vivimos ayer...Creo que se trata del trauma psicológico generado por la deshora en la que me di cuenta que amo el café con leche y todo por culpa de mi viejo que cuando yo era chica me llevaba al bar de la sede del Club Tiro Federal y mientras el jugaba a las bochas yo me tomaba todas las borras de café con restos de pucho que abandonaban los masculinos en las mesas del lugar.
Errar es divino, pero me parece, negro, que esto te va a costar mas de una caja de rhodesias...